Los superodenadores pueden hacer una cantidad ingente de cálculos, pero tienen dos pegas: son incapaces de aprender y gastan demasiada energía.
¿Qué pasaría si la informática lograra emular al cerebro en este sentido? En esta dirección han caminado científicos de la Harvard School of Engineering and Applied Sciences (SEAS) de Estados Unidos. Ellos han creado un nuevo tipo de transistor (que son los dispositivos utilizados para producir una señal de salida en respuesta a una señal de entrada) que imita el comportamiento de una sinapsis. El aparato creado, cuyas características aparecen detalladas en Nature Communications, hace lo siguiente: simultáneamente modula el flujo de información de un circuito y se adapta físicamente a señales eléctricas cambiantes.
En otras palabras, el transistor tiene la capacidad, a diferencia de los tradicionales de silicio, de proveer una salida permanente como un conductor o como un aislante, no necesitando energía para ello. A esto lo llamamos memoria no volatil y capacidad de aprendizaje. Otra de las características es que no es binario, sino que permite mas valores a parte de ceros y unos, teniendo en teoría infinitos estados de conducción.